Sala de espera

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Esta historia esta basada en una anécdota real de un suscriptor.

N del A

Soy estudiante de medicina, apenas llevo dos años en la escuela pero ya nos toca hacer rotaciones en el hospital, somos los que se conocen como “semestrosos” y estamos en lo más bajo de la cadena alimenticia del hospital, por debajo incluso de los internos y enfermería.

En el hospital el ver pacientes usando pañales es algo relativamente común, pues muchas personas graves que no se pueden mover o que están conectadas a un respirador no pueden levantarse para  ir al baño, también personas con incontinencia o alguna lesión medular deben usar pañales. Aunque lo más común es usar un pato para orinar en el caso de los hombres, o un cómodo para hacer pipí y popó. Y adivinaron, a nosotros a veces nos toca vaciar los patos y cómodos.

Eran poco más de las nueve de la noche y me tocó ayudar a la enfermera de triage a tomarle los signos vitales a una chica que entró a la sala de urgencias porque se había caído de la moto. Estaba recostada en la camilla de la ambulancia que la había traído, la verdad es que la chica no estaba grave, los paramédicos le habían puesto una férula en el pie que se veía algo hinchado, pero esa era la única lesión.

Después de tomarle signos vitales y platicar un poco con ella, había que esperar a que nos dieran el pase para rayos x, esto suele ser inmediato y más porque el hospital estaba relativamente vacío, pero en ese momento le estaban haciendo mantenimiento a la máquina y todavía se iban a tardar una  media hora más. así que la paciente, que tenía dieciséis años, tenía que esperar.

Ella estaba bastante cómoda recostada en la camilla, la madre estaba junto a ella y se le veía algo molesta, de vez en cuando hacía comentarios sobre que ya les había advertido a ella y a sus primos mayores (que por lo que entendí, uno de sus primos iba manejando la moto cuando cayeron en un bache y se cayeron de la moto) que no anduvieran tan noche en la calle, pues podría pasarles un accidente, justo como el que les acababa de pasar.

Desde que estaba tomándole los signos vitales la chica, comentaba que tenía ganas de ir al baño, y como no podía apoyar su pie izquierdo, después de que tome todos los datos, los paramédicos la ayudaron a bajar de la camilla y la madre la acompañó al baño.

Yo estaba ahí en el pasillo llenando algunos papeles y esperando que me avisaran en rayos x que ya podían pasar para darle la nota a los paramédicos para que la llevaran a tomar la radiografía. Con mucho trabajo y cojeando la chica entró con su madre al baño del pasillo, esos baños son individuales pero bastante amplios, pues suelen entrar personas con silla de ruedas o muletas, así que no había problema en que entraran dos personas.

Pasaba el tiempo y la chica y su madre no salían del baño, los paramédicos salieron para acomodar su ambulancia y yo me quedé ahí esperando, pasaron más de diez minutos y no se escuchaba ningún ruido dentro del baño, los paramédicos entraron nuevamente y no vieron a la chica ni a la madre y me preguntaron si ya la habían  llevado a rayos x, les dije que no, que seguía en el baño.

Pasaron un par de minutos más y por fin se escuchó algo de movimiento dentro del baño y todavía un rato después salieron la madre y la chica cojeando con su férula en el tobillo derecho.

Los paramédicos la tomaron y la ayudaron a subirse de nuevo, en ese momento yo estaba a los pies de la camilla viendo todo el movimiento, cuando por casualidad vi lo que había debajo de su short.

Estaba usando unos pantalones cortos algo holgados y al levantar las piernas para subirlas a la camilla pude ver claramente un blanco y esponjoso pañal debajo de su ropa. En mi experiencia personal se trataba de un Tena Pants, pues es de los que yo suelo llevar a veces al hospital, pues no se nota casi nada debajo del uniforme, que es un pantalón blanco. Si llevara un pañal ABDL con dibujos o un pull-ups o pampers, los diseños se notarían claramente a través de la tela.

Para ese momento empecé a analizar la situación, la chica se cubrió las piernas con una sudadera, que fue tal cual como la encontré cuando llegó. Los paramédicos la llevaron a sacar la radiografía y la madre fue a la sala de espera.

Como la persona chismosa (y amante de los pañales)  que soy, tenía que saber si la chica normalmente usaba pañal y había llegado con pañales al hospital o si la madre se los acababa de poner ahí en el baño. Recordé que cuando ingresó y le estaba tomando los signos vitales, la chica mencionó que tenía que ir al baño, yo le dije que iría en cuanto terminara de tomarle los signos vitales, en ese momento le dije a la madre que fuera a recepción a hacer el ingreso, después de tomar los signos vitales le volvió a decir a los paramédicos que tenía que ir al baño y ellos le contestaron que ahorita que regresara su madre para que la acompañara pues ella no podía entrar sola por lo de su pie que no podía apoyar.

Entonces la madre había tenido tiempo suficiente para hacer el ingreso (que no tarda nada porque solo es entregar el carnet y no había nada de gente en el hospital en ese momento) e ir a la farmacia (que está dentro del hospital justo enfrente de la recepción) para comprar un pañal para su hija.

Para tener certeza de mi teoría, fui al baño al que habían entrado, si la chica traía pañales desde que llegó, el pañal mojado debería estar en el bote de basura, aunque si ya hubiera hecho pipí en su pañal, no tendría tanta urgencia por ir al baño, pero bueno. Revisé todo el baño y no había rastro de ningún pañal botado a la basura. Entonces mi teoría de que la madre le había puesto un pañal después de que ella fue al baño tenía más fuerza.

La chica podía ir al baño sin ningún problema, el tobillo estaba lesionado pero lo más probable es que no fuera una fractura si no solo un esguince. Pero la madre ya había decidido que no quería complicarse la vida y ayudar a su hija a ir al baño cada que lo necesitara así que le puso un pañal para que no la molestara durante la noche.

Cerré la puerta del baño para regresar a mi lugar cuando en el suelo vi un ticket, sabía que era de la farmacia del hospital por el color azul de la tinta y el papel de un tono casi gris que parece de hace más de veinte años.

Lo levanté para echarlo a la basura.